Este miércoles, al menos 103 personas perdieron la vida y 141 resultaron heridas en la ciudad iraní de Kerman, tras dos explosiones cerca de la tumba del comandante militar Qasem Soleimani, en lo que las autoridades identificaron como un ataque terrorista, según informaron los medios estatales.
La primera explosión ocurrió a una distancia de 700 metros de la tumba de Soleimani, seguida por una segunda a 1 kilómetro, mientras peregrinos visitaban el lugar, según detalló IRNA. Hace cuatro años en esta misma fecha, Soleimani fue víctima de un ataque aéreo estadounidense ordenado por el entonces presidente Donald Trump en el Aeropuerto Internacional de Bagdad.
Hasta el momento, ningún grupo ha asumido la responsabilidad de los atentados. Videos difundidos en medios estatales iraníes mostraron grandes multitudes corriendo en la zona después de las explosiones.
Soleimani, figura destacada en Irán, dirigía la Fuerza Quds de los Cuerpos de la Guardia Revolucionaria, una unidad élite encargada de operaciones en el extranjero, designada por Estados Unidos como organización terrorista extranjera.
El Pentágono sostiene que Soleimani y sus fuerzas fueron “responsables de la muerte de cientos de miembros del servicio estadounidense y de la coalición, así como de las heridas infligidas a miles más”. Reconocido como el “comandante en la sombra” de Irán, Soleimani lideró la Fuerza Quds desde 1998 y fue el arquitecto de las operaciones militares iraníes en Iraq y Siria.
La explosión se produce en un momento tenso en la región
El supuesto atentado ocurrió en un momento de alta tensión en la región, ya que Israel está inmerso en una guerra de tres meses contra Hamas en Gaza, desencadenada por el ataque del grupo militante a Israel el 7 de octubre.
Durante esta guerra, más de 23,000 personas han perdido la vida en Gaza, según el Ministerio de Salud del enclave, liderado por Hamas. Además, se han producido enfrentamientos más allá de las fronteras de Israel y Gaza, involucrando a menudo a milicias respaldadas por Irán.
El martes, un alto líder de Hamas falleció en un suburbio de Beirut en una explosión que, según un funcionario estadounidense citado por CNN, se atribuye a Israel. Aunque Israel no ha confirmado ni negado su participación, tanto Hamas como el grupo militante Hezbollah, que controla el suburbio, responsabilizaron a Israel y amenazaron con venganza.
Hassan Nasrallah, líder de Hezbollah, tiene programado dar un discurso este miércoles, el tercero desde el inicio de la guerra, y este anuncio se hizo antes del atentado en Beirut.
La semana pasada, Irán y sus aliados acusaron a Israel de asesinar a un alto comandante iraní en Siria y prometieron represalias, mientras que Israel no emitió comentarios al respecto.
Israel acusa a Teherán de financiar y armar a Hamas. El ministro de Defensa de Israel, Yoav Gallant, declaró el mes pasado que su país se encuentra en una “guerra en múltiples frentes”, siendo atacado desde siete lugares, incluido Irán. “Ya hemos respondido y actuado en seis de ellos”, afirmó.
Estados Unidos también ha aumentado su intervención militar en Medio Oriente recientemente. El mes pasado, llevaron a cabo ataques aéreos contra Hezbollah Kataib, respaldada por Irán, y “grupos afiliados” en Iraq, después de que un ataque hiriera a tres soldados estadounidenses.
La semana pasada, helicópteros estadounidenses hundieron tres embarcaciones pertenecientes a los rebeldes hutíes respaldados por Irán en el Mar Rojo después de recibir disparos, resultando en la muerte de las personas a bordo. Fue la primera vez desde el inicio de las tensiones el año pasado que Estados Unidos atacó y mató a miembros del grupo rebelde.
La Casa Blanca afirmó que no buscaba un conflicto mayor, mientras que los hutíes han llevado a cabo varios ataques contra buques mercantes en el Mar Rojo en represalia por los ataques de Israel contra Hamas, afectando el comercio en una de las vías fluviales más importantes del mundo.
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