A falta de dos días para las elecciones estadounidenses, el presidente Donald Trump pasó a toda velocidad el domingo por algunos estados clave, en un intento por superar a su rival demócrata Joe Biden, quien suplicó a sus partidarios en la crucial Pensilvania que acudan a las urnas.
Trump, quien no quiere convertirse en el primer presidente que pierde la reeleccióndesde su par republicano George H.W. Bush en 1992, mantuvo un programa frenético, con mítines en Michigan, Iowa y Carolina del Norte, al tiempo que tenía previstas paradas en Georgia y Florida.
Biden lidera los sondeos nacionales, pero la carrera está ajustada en varios estados clave que podrían dar a Trump los 270 votos necesarios para ganar en el Colegio Electoral, que determina al vencedor final.
El exvicepresidente hizo dos apariciones en la disputada Pensilvania, el estado en el que nació y que se presenta como crucial en su camino a la Casa Blanca.
Bajo los copos de nieve que caían en Washington, al norte de Detroit, un abrigado Trump lució su característica gorra roja con las palabras Make America Great Again (Devolvamos su grandeza a Estados Unidos) mientras hablaba a una bulliciosa multitud en una mañana fría.
Después de que le cantaran “te amamos”, Trump respondió “yo los amo a ustedes también. Si no lo hiciera, no estaría de pie aquí, porque hace mucho frío. Más les vale salir a votar”.
Trump predijo que repetiría su victoria del 2016 en Michigan y resaltó sus esfuerzos para crear empleos automotrices, un asunto central para el estado.
El empleo en la industria de fabricación de autos en Michigan cayó unos 5 mil puestos desde que Trump asumió el cargo a principios de 2017, y en el rubro de autopartes hay unos 13 mil trabajos menos.
Trump habló luego en otro acto entusiasta en Dubuque, donde aludió a los productores agrícolas de Iowa, un estado conocido por sus cultivos de maíz, y predijo que ganaría allí como lo hizo hace cuatro años.
Entre sus paradas de campaña en Filadelfia, Biden criticó a Trump por animar a sus seguidores tras acosar a un autobús de campaña demócrata en Texas. Una caravana de autos con banderas pro Trump rodeó al bus, que llevaba a personal de la campaña por una autopista el viernes, obligando a cancelar dos eventos.
Trump retuiteó el sábado un video del incidente y escribió: “¡AMO A TEXAS!”.
El FBI dijo el domingo que abrió una investigación sobre el incidente en Texas.
Comentando un reporte de Axios que indicó que Trump dijo a sus confidentes que declarará la victoria en la noche del martes si parece que va por delante, incluso aunque no esté claro el resultado en el Colegio Electoral, Biden afirmó: “El presidente no se va a robar esta elección“.
Trump dijo a los reporteros que la noticia es falsa, pero indicó que sería “una cosa terrible” que las papeletas sean contadas después de la elección del martes, lo que enciende las alarmas ante una posible crisis electoral y acusaciones de un presunto fraude.
Con información de medios internacionales
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