De acuerdo con la más reciente encuesta nacional sobre consumo de líquidos, coordinada por el Dr. Homero Martínez del Hospital Infantil de México Federico Gómez, solo 3 de cada 10 mexicanos toman al menos un vaso de agua simple.
“El agua potable es uno de los líquidos que se consume con menos frecuencia por la población, el 30 por ciento de ingestión diaria de líquidos proviene de agua simple y por otro lado, las bebidas azucaradas, los refrescos fundamentalmente, constituyen el líquido de mayor consumo diario.
“Es de preocuparse porque el alto consumo de bebidas azucaradas motiva la presentación de sobrepeso, obesidad, enfermedad cardiovascular, padecimientos crónicos que incrementan el riesgo y mortalidad en el caso de la pandemia que estamos viviendo por covid-19”, alertó Homero Martínez Salgado, profesor-investigador en Ciencias Médicas del Hospital Infantil de México Federico Gómez.
El investigador indicó que el estudio se realizó con 2 mil 346 participantes, entre niños, adolescentes y adultos, de 16 ciudades del país. Encontraron que entre el 69 y 82 por ciento de la población estudiada toma más de un vaso de bebidas azucaradas diariamente y solo el 34 por ciento consume menos de un vaso de agua al día.
“Dos terceras partes de la población en México, consumen menos líquidos de los recomendados para su edad y sexo. Niños, adolescentes y adultos consumen menos de una medida de agua por día, una medida son 250 ml o un vaso mediano. La mitad de la población consume más de una medida de bebidas azucaradas, que representan el líquido de mayor consumo diario y en ocasiones es bastante considerable, ya que las tres cuartas partes de la población consumen más de una medida de bebidas azucaradas”, resaltó.
¿POR QUÉ PREFIEREN REFRESCOS?
El investigador Homero Martínez destacó que el consumo de bebidas azucaradas tiene que ver con la facilidad para adquirirlas, o a veces la baja disponibilidad de agua en algunas regiones, pero los consumidores de refrescos reportaron sensaciones de placer, prestigio y moda.
“Por un lado, tiene que ver con la facilidad, con la conveniencia, con estatus, con la sensación al destapar una lata o la botella, les gusta el sabor del bicarbonato, el CO2 que hace la sensación de burbujas en la boca, pero también hay otro grupo de personas que prefiere el agua simple, que es una bebida sana, tiene que ver mucho con sensaciones, aunque la disponibilidad del agua es un factor importante dentro de las opciones que uno tiene”, indicó.
Asimismo, Martínez Salgado destacó que existe desconfianza por parte de la población respecto al agua potable que se distribuye a través de la red pública, por lo que 80 por ciento de la población consume agua embotellada y solo 20 por ciento agua de la red pública.
El asunto, es que incluso el agua embotellada que se rellena en locales tiene algún grado de contaminación, pues refirió que de acuerdo con estudios realizados por el Instituto Politécnico Nacional, la Universidad Nacional Autónoma de México y el Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán, se han detectado rastros de heces fecales en los garrafones que rellenan 6 de cada 10 embotelladoras de agua de la Ciudad de México.
“Aproximadamente el 62 por ciento de los sitios de recolección presentaron contaminación con bacterias coliformes, estos datos provienen de diferentes puntos de recolección en la Ciudad de México, no uno solo, sino en las diferentes delegaciones se ha encontrado que en los diferentes puntos de muestreo hay contaminación.
Dijo que las bacterias coliformes usualmente existen en el organismo humano y si aparecen en el agua “lo que reflejan es contaminación fecal”, por ello buena parte de la contaminación del agua se da por parte de quienes manejan el agua y los envases, así como por falta de higiene de los recipientes.
Fuente: Milenio
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