El Departamento de Justicia de Estados Unidos (DOJ) afirmó este jueves que la respuesta de la policía al tiroteo fatal en la escuela de Uvalde en mayo de 2022 “resultó ser ineficaz”. En un informe detallado sobre el incidente, en el cual perdieron la vida 19 estudiantes y dos profesores, el DOJ argumentó que las fuerzas del orden no lograron identificar adecuadamente la presencia de un tirador activo.
A pesar de la llegada de cientos de agentes a la escuela primaria Robb, se señaló que transcurrió más de una hora antes de que pudieran enfrentar y neutralizar al perpetrador de la masacre. El informe también destacó “fallos en cadena” que abarcaban aspectos como el liderazgo, la toma de decisiones, las tácticas, las políticas y la capacitación.
Se describió una situación de “gran confusión, falta de comunicación, falta de urgencia y falta de control del incidente” durante su desarrollo.
La matanza de 19 escolares sumió en la tragedia a la localidad de Uvalde.
El fallo más importante
La demora en la respuesta de los agentes de policía constituye uno de los temas principales abordados en el informe extenso de más de 400 páginas publicado este jueves.
De acuerdo con el documento, en situaciones con un tirador activo, se espera que las fuerzas del orden “neutralicen de inmediato al individuo”, subordinando “todo lo demás, incluida la seguridad de los agentes, a ese objetivo”.
No obstante, la policía de Uvalde adoptó una postura de espera y trató el ataque como una situación de atrincheramiento, según indica el informe. Se señala que el fallo más destacado fue la falta de reconocimiento inmediato por parte de los agentes que respondieron, quienes debieron identificar de inmediato el incidente como un caso de tirador activo.
Aunque los primeros agentes llegaron tres minutos después de que el autor iniciara el tiroteo y se dirigieron a una sala de clases, se retiraron después de ser alcanzados por la metralla de los disparos. El informe describe que 48 minutos después de que el hombre armado ingresara a la escuela y se produjeran cuatro disparos adicionales, los agentes se dirigieron hacia los sonidos de los disparos “fuera de las puertas del aula, pero no entraron”.
Falta de liderazgo
Pete Arredondo, el ex jefe de policía escolar de Uvalde, fue ampliamente señalado en el informe por la respuesta confusa y lenta durante el incidente, siendo “el comandante de facto en la escena el día del suceso”.
El informe alega que Arredondo no proporcionó el liderazgo, mando y control adecuados, y sugiere que sus fallos podrían haber sido influenciados por deficiencias en políticas y capacitación. Uno de los errores señalados fue la falta de una radio portátil, lo que obligó a comunicarse verbalmente o por teléfono celular con su equipo.
Imagen muestra a agentes de policía armados esperando en el pasillo del colegio de Uvalde durante el tiroteo.
Los residentes de Uvalde, un pequeño pueblo en Texas con aproximadamente 15,000 habitantes, esperaban ansiosos el informe del Departamento de Justicia desde que fue anunciado días después del trágico tiroteo del 24 de mayo de 2022, uno de los más mortíferos en la historia de Estados Unidos.
En su visita a Uvalde el miércoles, el Fiscal General Merrick Garland se detuvo ante los murales de las víctimas y se reunió con las familias afectadas. Representantes del Departamento de Justicia se reunieron en privado con las familias antes de la publicación del informe.
Berlinda Arreola, cuya nieta perdió la vida en el tiroteo, expresó a Associated Press después de la reunión: “Siento muchas emociones en este momento. No tengo muchas palabras que decir”. Oscar Orona, cuyo hijo resultó herido en el incidente, declaró al Washington Post: “Creo que el informe confirmará lo que sabíamos todo este tiempo, que fue un fracaso abismal”.
Los agentes han estado en el punto de mira desde que comenzaron a salir a la luz detalles del suceso.
La solicitud de la investigación provino del ex alcalde de Uvalde, Don McLaughlin, luego de relatos contradictorios de funcionarios estatales sobre los acontecimientos durante los aproximadamente 77 minutos hasta que la policía pudo neutralizar al tirador de 18 años que disparaba con un rifle estilo AR-15 en dos aulas de cuarto grado. A pesar de la presencia de casi 400 agentes en la escuela primaria Robb, las víctimas y sus familias sostienen que la actuación fue demasiado tardía.
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