La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) clausuró actividades en un predio de cinco mil metro cuadrados, ubicado en el semidesierto de Querétaro, por no contar con los permisos ambientales correspondientes.
Mediante un comunicado, informó que esto se derivó en atención a una denuncia ciudadana, pues durante la inspección no fue exhibida la autorización correspondiente emitida por la Semarnat.
En la zona se realizaba retiro de flora nativa del sitio, y se explotaban recursos naturales de manera privada.
La Profepa dio parte a las instancias federales correspondientes, para dar seguimiento al procedimiento judicial y administrativo.
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