Fecha de hoy23 noviembre, 2024

Hipertensión es el principal factor de riesgo de accidente cerebrovascular

En los últimos 30 años, el número de adultos de entre 30 y 79 años con hipertensión en todo el mundo se ha duplicado, pasando de unos 331 millones de mujeres y 317 millones de hombres en 1990 a 626 millones de mujeres y 652 millones de hombres en 2019, y la mayor parte de este aumento se ha producido en los países de ingresos bajos y medios (PIBM). El estudio internacional, publicado en’ The Lancet’, analizó las mediciones de la presión arterial de más de 100 millones de personas tomadas durante tres décadas en 184 países.

A pesar de ser fácil de diagnosticar y relativamente fácil de tratar con medicamentos de bajo coste, casi la mitad de las personas (el 41% de las mujeres y el 51% de los hombres) con hipertensión en todo el mundo en 2019 desconocían su condición y más de la mitad de las mujeres (53%) y los hombres (62%) con la condición no fueron tratados. A nivel mundial, la presión arterial estaba controlada en menos de 1 de cada 4 mujeres y 1 de cada 5 hombres con hipertensión.

Las grandes mejoras en las tasas de tratamiento y control observadas en algunos países de ingresos medios, como Costa Rica, Kazajstán, Sudáfrica, Brasil, Turquía e Irán, en las últimas tres décadas demuestran que la ampliación de la cobertura sanitaria universal y el fortalecimiento de la atención primaria han sido fundamentales para mejorar la atención a la hipertensión y reducir la carga de esta enfermedad. Algunos de estos países, como Costa Rica, han logrado tasas de tratamiento y control tan buenas o mejores que las de muchos países de ingresos altos.

La hipertensión arterial está directamente relacionada con más de 8.5 millones de muertes al año en todo el mundo y es el principal factor de riesgo de accidente cerebrovascular, cardiopatía isquémica, otras enfermedades vasculares y enfermedades renales. Reducirla puede rebajar el número de accidentes cerebrovasculares en un 35%-40%, los infartos de miocardio en un 20%-25% y la insuficiencia cardíaca en un 50% aproximadamente.

“A pesar de los avances médicos y farmacológicos de las últimas décadas, el progreso mundial en el tratamiento de la hipertensión ha sido lento, y la gran mayoría de los hipertensos siguen sin tratamiento, con grandes desventajas en los países de ingresos bajos y medios”, afirma el profesor Majid Ezzati, del Imperial College de Londres (Reino Unido), autor principal del estudio.

“Nuestro análisis ha revelado la existencia de buenas prácticas en el diagnóstico y tratamiento de la hipertensión no sólo en los países de renta alta, sino también en los de renta media –prosigue–. Estos éxitos demuestran que la prevención de la hipertensión y la mejora de su detección, tratamiento y control son factibles en los entornos de ingresos bajos y medios si los donantes internacionales y los gobiernos nacionales se comprometen a abordar esta importante causa de enfermedad y muerte”.

Fuente: Milenio

Compartir noticia
Share

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *