Los retratos son más reales e íntimos jamás realizados por la monarquía británica.
En las tres fotografías los recién casados se muestran sonrientes acompañados por parte de la familia real y por los niños del cortejo que acompañaran a Markle en su entrada a la iglesia.
La pareja fue capturada por Alexi Lubomirski, de 42 años, el favorito del reconocido fotógrafo Mario Testino, quien fue muy amigo de Lady Di, pero quedó relegado de la familia real tras conocerse varias denuncias por acoso en su contra.
La duquesa de Sussex dejó en claro que tiene la intención de llevar a la familia real a una nueva dirección, declarando que está “orgullosa de ser una mujer y una feminista”.
Con su ceremonia de boda multicultural, un coro de gospel y el ardiente sermón de un predicador de Chicago, fue algo que la realeza conservadora nunca había experimentado antes.
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